¿Sabías que comer determinados alimentos puede mejorar muchísimo el aspecto de tu piel? Si bien no existe ninguna comida que por sí sola te quite las arrugas, es verdad que diversos elementos que tienes en la alacena pueden hacer lucir tu rostro más joven. 

Veamos algunos trucos para implementar en tu dieta cotidiana y así tener una piel tersa, suave y menos ajada.

• Limitar el consumo de azúcar: incorporar grandes cantidades de azúcar provoca inflamación en diversas áreas del organismo y acelera el proceso de envejecimiento. Además, este elemento daña las células de colágeno, provocando arrugas. Trata de restringir el consumo de azúcar de mesa, pastas, pan y arroz muy refinados.
  
  
• Incorporar antioxidantes: existen muchos alimentos que contienen antioxidantes, poderosísimos elementos naturales que protegen al cuerpo de los radicales libres que dañan las células sanas. Algunas frutas ricas en antioxidantes son las ciruelas y los arándanos frescos.
  
  
• Incorporar vitamina E: este es uno de los elementos antiedad más eficaces que hay. El mercado ofrece una gran variedad de productos con el nutriente, que mantiene la piel clara y saludable, protegiéndola de los agentes dañinos del ambiente. Puedes optar por consumir alimentos como almendras, semillas de girasol, espinaca cocida y aceitunas verdes: todos son completas fuentes de vitamina E.
  
  
• Incluir vitamina C: ya sabemos que es buena para el resfrío porque mejora el sistema inmunológico; sin embargo, la vitamina C también estimula la producción de colágeno, sustancia que mantiene tu piel joven y tersa. Pimientos rojos, naranjas, limón, piña, tomate, chiles, col rizada y guayaba son los alimentos naturales más adecuados para obtenerla.
  
  
• Comer lo suficiente: seguramente, no muchas dietas sostienen que es necesario consumir suficiente comida. No obstante, un corte drástico en las calorías ingeridas provoca insuficiencia de nutrientes esenciales en tu organismo. Las consecuencias van desde uñas quebradizas hasta pérdida del cabello y piel seca.
  
  
• Consumir grasas saludables: las grasas buenas son parte de una dieta saludable. Salmón, rodaballo, nueces, semillas de lino, repollo son alimentos naturales ricos en ácidos grasos esenciales Omega 3, los cuales protegen tu piel del daño solar y de los agentes dañinos.
  
  
• Reducir la ingesta de café: la cafeína y el alcohol son dos elementos diuréticos que provocan pérdida de agua en el organismo. Como consecuencia a largo plazo, la piel puede verse arrugada y seca. Procura reemplazar el café por té sin cafeína o agua, para incorporar líquido de manera saludable.
  
  
• Otros tips importantes: finalmente, recordemos que además de una alimentación balanceada, para que tu dermis luzca sana es necesario que duermas la suficiente cantidad de horas, tomes mucha agua a lo largo de todo el día y cuides tu piel del sol con los productos adecuados.