Es verdad que existen muchos alimentos que, con
solo verlos, se sabe que son comida chatarra. Sin embargo, no siempre es tan
fácil identificar cuáles son las comidas sanas. Esto necesita un poco de
investigación, es decir, que requiere que leamos la información nutricional de
los envases para saber identificar los ingredientes de cada comida y conocer
su composición.
Es importante que cuando salgas a comer afuera
tengas en cuenta el modo de preparación de los platos. Comúnmente la comida
chatarra es frita o sumergida en grasa; en cambio, los alimentos más sanos
suelen ser los que han sido grillados u horneados.
Como regla general debes
tratar de mantener sana la comida que de por sí es saludable, limitando los
añadidos. Una ensalada es saludable pero dejará de serlo si te excedes con el
aderezo.
Asimismo, las pastas y los vegetales son
alimentos fabulosos que puedes arruinar si les agregas una salsa cremosa llena
de sodio y grasa. El queso, la crema ácida y la mayonesa suelen aportar todavía
más grasas y calorías. A continuación veremos paso a paso cómo detectar los alimentos
poco saludables a través de las etiquetas de los paquetes.
Paso 1: Lee la etiqueta con la información
nutricional desde el principio hasta el final.
Paso 2:
Fíjate en la cantidad de calorías por
porción y especialmente, en el número de calorías provenientes de la grasa. La
comida basura generalmente provee una alta proporción de calorías por porción y
la mayor parte de ellas está representada por los lípidos.
Una comida saludable
debería ser más baja en calorías y pocas de estas deberían venir de las grasas.
Se calcula que en una dieta de 2000 calorías diarias se deben consumir menos de
65 gramos de lípidos al día, por lo tanto en una dieta de 1,500 deben ser máximo 48 gramos.
Paso 3:
Analiza los tipos de grasa que la
comida contiene. Usualmente los alimentos basura son ricos en grasas malas
(saturadas y trans) La Asociación Cardíaca Americana de EEUU aconseja que el
consumo de grasas trans sea menor al 1% del total de calorías diarias. Así, si
llevas una dieta de 2000 calorías por día no puedes incorporar más de 2 gramos
de grasas trans. Además menos del 10% de tus calorías deberían provenir de las
grasas saturadas.
Por lo general, las comidas saludables no
aportan grasas saturadas ni trans, o bien solo incluyen una pequeña proporción
de las mismas.
Paso 4: Considera la cantidad de sodio y
colesterol presente en la comida. Para una dieta diaria basada en 2000
calorías, deberías incorporar menos de 300 miligramos de colesterol y hasta
2400 miligramos de sodio. Mientras más altos sean estos números, menos
saludable será la comida contenida en el paquete.
Paso 5: Revisa el aporte de fibra; una buena fuente de fibra provee 2,5 gramos o más de este nutriente por porción, y generalmente los alimentos chatarra no contienen mucha de esta.
Paso 6: Lee el aporte de fibra alimentaria,
vitaminas C y A, calcio y hierro. Se trata de nutrientes beneficiosos que
generalmente faltan o son bajos en los alimentos basura; comúnmente, no cubren
más del 5% de la Ingesta Diaria Recomendada de estos elementos (el % de IDR generalmente está especificada en la etiquetas). Para que una
comida sea considerada nutritiva, debe aportar al menos 20% de los nutrientes
importantes para el organismo que hemos mencionado.
Paso 7: Considera el porcentaje global de
nutrientes como fibra, calcio, hierro, vitamina A y vitamina C. Una comida
saludable no necesita ser alta en estos nutrientes; una naranja, por ejemplo,
provee 130% de la Dosis Diaria Recomendada de vitamina C, pero solo contiene 2%
del aporte aconsejado de vitamina A y no posee hierro. Es decir que algunas
comidas sanas brindan mucho de un nutriente y otras proveen pocas cantidades de
una gran variedad de elementos.
Paso 8: Observa el contenido de azúcar y
compáralo con la lista de ingredientes. Algunos alimentos naturales como la
fruta tienen azúcares, y los azúcares de origen natural no van a aparecer en
las etiquetas. La comida chatarra normalmente contiene una fuerte cantidad de
azúcar agregado, que encontrarás listado bajo muchas formas: jarabe de maíz de
alta fructosa, maltosa, dextrosa, sucrosa, miel, concentrado de jugo de frutas,
jarabe de arce.
Paso 9: Presta atención al orden de los
ingredientes, pues esto te indicará la proporción de cada uno dentro del
alimento. Generalmente el primer elemento compone la mayor parte, el segundo
elemento tiene la mayor presencia después del primero y así sucesivamente. Si
ves que el azúcar, la sal o la grasa encabezan la lista, seguramente se tratará
de comida chatarra.